Luego de 4 intensos días de trabajo, debates y propuestas, cerró la XXII Cumbre de Mercociudades bajo la consigna «Gobernanza e innovación para el desarrollo de políticas regionales». Asistieron más de 600 participantes, procedentes de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay. Además de invitados e invitadas de ciudades y redes de ciudades de Europa y África.


«La proyección internacional de las ciudades es hoy una realidad basada en la proximidad del gobierno local a las necesidades y prioridades de sus habitantes y las oportunidades del entorno global. En este sentido, la internacionalización de las ciudades tiene que ser fruto del trabajo conjunto del sector público, del sector privado, del académico y de la sociedad civil.

En este marco, hablamos de una gobernanza en la gestión internacional de las ciudades, como modo de crear una política pública de bases participativas, donde cada sector se compromete con recursos y se apropia de la misma, conduciendo una gestión asociada.

Como Mercociudades, sabemos que una gestión internacional efectiva debe tener en cuenta el trabajo en red e ir en consonancia con las ciudades de la región, dado que las posiciones de los gobiernos locales ante los problemas del desarrollo y los temas de agenda global se potencian cuando son compartidas.

Reafirmamos el rol fundamental de los gobiernos locales en los debates internacionales y trabajaremos con convicción para que las voces de nuestros Intendentes/as, Alcaldes/as y Prefeitos/as sean escuchadas y tengan su lugar en la mesa global.

La Agenda 2030 y la Nueva Agenda Urbana, así como otras, se han consolidado como elementos fundamentales para pensar el desarrollo de las ciudades y están siendo difundidas e incorporadas por numerosos actores vinculados a la vida de las ciudades.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) incluyen las responsabilidades de los gobiernos locales por tratarse de cuestiones relativas a la cercanía con la población, la participación ciudadana y la prestación de servicios básicos. En este sentido, uno de los principales desafíos de la Agenda 2030 es el rol que desempeñen los gobiernos y su articulación con la Agenda de Cambio Climático y Hábitat III.

Como Mercociudades reconocemos que la localización de los ODS en las ciudades implica integrarlos a los ejes estratégicos de la política gubernamental, incluyendo la incorporación de las tres dimensiones del desarrollo sostenible (social, económico y ambiental) y la definición de un núcleo prioritario de metas e indicadores que permitan el seguimiento y la orientación de las acciones de gobierno. En este sentido, las Unidades Temáticas tienen la necesaria tarea de traducir y trasladar los ODS a las realidades locales.

Es fundamental ajustar los programas de desarrollo de las ciudades a la Nueva Agenda Urbana para abordar con responsabilidad el rol que se le ha otorgado a las ciudades en esta materia implicándose en políticas y acciones de cooperación para ciudades más inclusivas, sostenibles y resilientes.

Sobre la regionalización, apostamos por institucionalizar y formalizar mecanismos de cooperación descentralizada dentro de la Red de Mercociudades. Y resulta fundamental fortalecer el Foro de Municipios, Provincias y Departamentos del MERCOSUR (FCCR), para promover la participación activa mediante la transmisión de demandas y proyectos y aportar la experiencia acumulada de los miembros de la Red en una integración regional profunda.

Los gobiernos locales han visto incrementar la participación ciudadana y de las organizaciones de la sociedad civil en la escena política, ante las demandas de respuesta a las necesidades sociales y de hacer efectivos los supuestos de la democracia.

Mercociudades refuerza su compromiso con los postulados de la Convención de los Derechos de las personas con Discapacidad, para el beneficio de nuestras ciudadanas y ciudadanos.

Hoy celebramos el día mundial de la lucha contra el SIDA y nos comprometemos al desarrollo de políticas públicas que contribuyan al cumplimiento del ODS 3 “Garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades”.

Se reconoce a Mercociudades como un actor regional de gran relevancia que ha logrado permanecer y desarrollarse como una usina generadora de propuestas y de ideas desde lo local hacia lo regional. No obstante, es necesario fortalecer la Red de Mercociudades, mejorar su gobernanza y promover su capacidad de incidencia en las agendas globales, como forma de contribuir y avanzar en el proceso de integración regional.

La propuesta de gobernanza e innovación de la Presidencia de Córdoba para el año 2018, plantea implementar modalidades de trabajo hacia adentro de la red, con estructuras horizontales que se retroalimenten con la creación de políticas públicas regionales.

Conocer el contexto social de cada miembro de la Red, sus particularidades y experiencias exitosas es fundamental para promover políticas desde lo local, de forma apropiada a las realidades de las distintas ciudades. La cooperación técnica descentralizada puede ser un instrumento que favorezca el intercambio de experiencias. En este sentido, la reactivación del Banco de Buenas Prácticas permitirá dar a conocer iniciativas que pueden replicarse en el marco de un proceso de mutuo aprendizaje y trabajo continuo.

En nuestra Red reconocemos que las ciudades son verdaderos centros de conocimiento e innovación, que han demostrado su capacidad para encontrar soluciones innovadoras a problemas concretos.

Fomentaremos la cooperación internacional y el intercambio de conocimientos como herramientas claves para mejorar los entornos urbanos.

Proponemos el impulso de vínculos con organismos internacionales y de financiamiento para fortalecer las capacidades económicas y técnicas de los gobiernos locales en el desarrollo de políticas públicas sostenibles con una mirada regional.

Propiciaremos el trabajo articulado entre las distintas instancias, de acuerdo a la nueva gobernanza para lo cual será fundamental la comunicación constante entre la Presidencia y las Vicepresidencias y la coordinación efectiva en el desarrollo de las actividades con las Unidades Temáticas. Proponemos para ello, el diseño de un plan de metas y su implementación, para dotar de un instrumento de participación, transparencia y control del trabajo a la Red.
Por último, como Mercociudades nos comprometemos a fortalecer el MERCOSUR y la UNASUR porque estamos convencidos de que son nuestra base, y son procesos estratégicos que nos permiten empoderar a nuestra ciudadanía así como garantizar el derecho a la ciudad.»

1° diciembre de 2017