El pasado 23 de mayo Jefes de Estado de 11 países sudamericanos firmaron el texto constitutivo de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR), entregado por el mandatario boliviano, Evo Morales, en la sesión inaugural de la Cumbre.
El único mandatario que no asistió a la cita fue el uruguayo Tabaré Vázquez, quien estuvo representado por su vicepresidente, Rodolfo Nin Novoa.
«Este tratado es el punto de encuentro de los países de nuestra América», expresó el líder boliviano, a cuyo cargo se encuentra la presidencia pro témpore del mecanismo.
Tras el discurso de apertura de la cumbre realizado por el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, el jefe de Estado de Bolivia dio lectura a los preceptos y principios de la carta que da comienzo a la UNASUR.
«Apoyamos la historia compartida y solidaria», dijo al informar sobre el fin de las negociaciones del tratado.
La cumbre extraordinaria tuvo lugar en el Centro de Convenciones Ulysses Guimaraes, donde también se debatió sobre energía, infraestructura, políticas sociales y educación.
La UNASUR, que debe ser aprobada por los congresos nacionales para su plena entrada en vigor, estará formada por Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela y suma una población de 388 millones de personas, un PIB de 1,9 billones de dólares.
Se creo con la intención de ser un gran foro de diálogo y concertación política para los países sudamericanos, además de espacio de debate de los grandes temas de la integración, que reunirá a los presidentes una vez por año y deberá funcionar por consenso.
A pesar de la intenciones de la UNASUR, uno de los temas de conflicto son las grandes diferencias en los modelos económicos y políticos, y en las orientaciones internacionales, con proyectos más nacionalizadores y de izquierda en Bolivia, Ecuador y Venezuela, o un Perú y una Colombia más cercanos a EEUU, sin embargo se manifiesta entre los mandatarios la prioridad en cuanto a la importancia de la concertación.
Brasil, el primer interesado en difundir el mensaje de la integración regional, espera que la cumbre ofrezca una oportunidad de acercamiento para la candente crisis entre Colombia, Ecuador y Venezuela, informó la pasada semana el principal asesor internacional del gobierno, Marco Aurelio Garcia.
El tratado constitutivo de la UNASUR llama a «construir una identidad y ciudadanía sudamericanas y desarrollar un espacio regional integrado», según extractos a los que tuvo acceso la AFP.
Se fija objetivos como fortalecer el diálogo político, asegurar un espacio de concertación, llama a la integración, entre otros energética energética, y a logros sociales como erradicar la pobreza.