Luego de 61 años de gobierno del Partido Colorado, Fernando Lugo, como representante de la Alianza Patriótica para el Cambio (APC), asumió hoy, 15 de agosto, la presidencia de Paraguay.
Durante la ceremonia Lugo ratificó sus postulados a favor de la justicia social y económica, y prometió trabajar por la integración regional y contra la corrupción.
El ex obispo Fernando Lugo juró esta mañana como nuevo presidente de Paraguay y asumió formalmente el cargo, por medio de un discurso, en castellano y guaraní. Su mandato se extenderá hasta el 2013.
En este sentido, Lugo afirmó que «la austeridad y la probidad serán el norte de nuestra gestión» y afirmó que «hoy termina un Paraguay con fama de corrupción. «Seremos implacables con los ladrones de la Nación», enfatizó.
También habló de un pacto social entre los sectores y afirmó: «Renuncio a vivir en un país donde unos no duermen porque tienen miedo y otros no duermen porque tienen hambre».
Asistieron a la toma de mando nueve presidentes latinoamericanos, Hugo Chávez, de Venezuela; Cristina Fernández, de Argentina; Luiz Inácio Lula Da Silva, de Brasil; Rafael Correa, de Ecuador; Michelle Bachelet, de Chile; Evo Morales, de Bolivia; Tabaré Vázquez, de Uruguay; Manuel Zelaya, de Honduras; y Daniel Ortega de Nicaragua. También asistieron los presidentes de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, y de Taiwán, Ma Ying-jeou, el príncipe heredero de España, Felipe de Borbón, y el secretario de Comercio de Estados Unidos, Carlos Gutiérrez.
El ex obispo juró con voz fuerte y la mano en alto el compromiso «ante Dios y la Patria» de cumplir en forma sus obligaciones, Seguidamente prestó juramento el vicepresidente electo, Federico Franco, del Partido Liberal, segunda fuerza política del país y principal integrante de la Alianza Patriótica para el Cambio.
Lugo, afiliado a la Teología de la Liberación y de perfil ideológico centroizquierdista, asumirá el cargo secundado por un gabinete ministerial tan heterogéneo como la propia Alianza Patriótica para el Cambio (APC), la coalición de 10 partidos políticos y más de 20 movimientos sociales que lo llevó al triunfo en las elecciones generales de abril.
También y por primera vez en la historia de este país una mujer indígena, Margarita Mbywangi, estará al frente de la secretaría de Estado que atiende los problemas de este sector de la población.
Nicanor Duarte termina su mandato de cinco años en medio de graves acusaciones de corrupción, una denuncia persistente sobre administraciones anteriores, despilfarro de los recursos estatales y el nivel más bajo de popularidad entre los presidentes de América Latina, según una encuesta realizada por la firma mexicana, Consulta Mitofky.