«Entre Ríos cierra las fronteras» es la consigna que mantendrán los ciudadanos argentinos de la costa del Río Uruguay en rechazo a la instalación de las plantas de celulosa en las cercanías de la ciudad uruguaya de Fray Bentos. La medida busca afectar los ingresos que genera el turismo argentino en Uruguay.
Unos 200 vehículos circulaban del lado argentino, cuando un grupo de medio centenar ‘vecinos autoconvocados’ cortaron el paso sobre el puente internacional General San Martín que une la ciudad argentina de Gualeguaychú con Fray Bentos, donde se construyen las dos polémicas plantas.
La protesta se inició sorpresivamente en la madrugada –la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú la había anunciado para las 08H00 (11H00 GMT)–, y se prolongará por varias horas, informó la prensa.
El grupo de manifestantes colocó escombros, troncos y atravesó automóviles sobre la ruta de acceso al puente para evitar el paso de vehículos, obligando a los conductores a desviarse unos 100 km más al norte para cruzar la frontera por el paso que une la ciudad argentina de Colón con la uruguaya Paysandú.
Los integrantes de la Asamblea Ciudadana Ambiental decidieron el cierre de frontera con el Uruguay para desmentir informaciones que circularon a nivel nacional y que minimizan los posibles riesgos ambientales que acarrearía el funcionamiento de las plantas.
Los integrantes de la Asamblea Ciudadana Ambiental vienen manteniendo la medida haciendo un nuevo llamado a la ciudadanía a acompañarlos, tras la jornada del domingo pasado donde se concentró gran parte de la atención de los medios de ambos países.
En el seno de la Asamblea se consideró que una medida concreta, con todo lo que implica hablar de «un cierre de frontera», era lo adecuado para demostrar que sigue firme la lucha en contra de la instalación de las dos plantas frente a Gualeguaychú, en la orilla del Río Uruguay.
La concentración ciudadana se hará al igual que ayer en el parador de Otero, sobre la ruta internacional 136, para marchar hacia el lugar del corte.
También en las localidades argentina de Colón y Concordia las asambleas respectivas están dispuestas a unirse a la propuesta de Gualeguaychú, como forma de hacer sentir al gobierno uruguayo el descontento de una parte de la población de la provincia argentinade Entre Ríos.
Otra de las consignas de los manifestantes es la que dice «Todo esfuerzo es útil a la hora de generar conciencia».
En este sentido, un comunicado de la Asamblea dice que «la permanencia de los vecinos en la ruta internacional no será afectada por el calor o el mal tiempo: se comparte el criterio de que son horas decisivas para dejarse amilanar por estas posibilidades, ínfimas en comparación con lo que podrá suceder si las pasteras llegaran a ponerse en marcha».
La Asamblea recibió un apoyo explícito cuando el intendente de Gualeyguachú, Daniel Irigoyen, estableció un asueto para que el personal municipal pudiera participar del corte de la ruta.
Sin embargo, el movimiento sufrió un duro traspié el 19 de diciembre, al difundirse en Washington un informe preliminar de la Corporación Financiera Internacional (CFI) del Banco Mundial (BM) que consideró que los proyectos cumplen sus requisitos técnicos ambientales.
No obstante, la CFI abrió un proceso de consultas antes de determinar si financia los proyectos con el 10% del total de la inversión que significaría su aporte.