CumbreSin acuerdo sobre el futuro del ALCA terminó la IV Cumbre de las Américas. Con una firme oposición de los países del MERCOSUR más Venezuela, el tratado de libre comercio con América del Norte quedó en suspenso incluyendo dos posturas encontradas en la Declaración Final del evento.


Con una serie de movilizaciones populares anti cumbre, los presidentes de los países del MERCOSUR hicieron sentir su peso a la hora de definir posición sobre el alcance del acuerdo impulsado por los EEUU.

Encabezando las actividades anti cumbre, el Presidente de Venezuela Hugo Chávez habló por más de tres horas en el Estadio mundialista de Mar del Plata, donde también se hicieron presente Daniel Viglietti, Silvio Rodriguez y Diego Maradona entre otros.

Por su parte el presidente George W. Bush reconoció ayer que debe esforzarse más para convencer a Brasil de los beneficios del Área de Libre Comercio de las Américas.

Bush hizo declaraciones después de reunirse con el presidente Luiz Inacio Lula da Silva, quien tuvo un papel clave en la cumbre de las Américas que finalizó el sábado en Argentina para impedir un acuerdo que permitiera reanudar las conversaciones para crear un bloque comercial desde Alaska hasta Tierra del Fuego.

«Hay que convencerlo, así como hay que convencer al pueblo estadounidense, de que un acuerdo comercial que abarque a todo nuestro hemisferio generará empleos y mejorará la calidad de vida», dijo Bush.

El presidente estadounidense, en su primer viaje a Brasil, intentaba también mejorar la imagen de su país en América Latina.

En un discurso expresaba dos posiciones sobre el futuro de América Latina -una apoyada por Estados Unidos para la expansión de instituciones democráticas y otra apoyada por líderes a los que no nombraría que quieren volver a épocas anteriores- dijo el vocero Scott McClellan.

BRASIL DICE

En un principio Brasil estaba de acuerdo con Washington sobre una zona comercial regional. Pero ahora exige que Estados Unidos reduzca los subsidios agrícolas que, según Lula, impiden el ingreso de productos brasileños al mercado estadounidense.

Lula insistió en su posición de que es prioritario resolver esos problemas a través de la llamada ronda Doha de negociaciones para un acuerdo comercial global.

«Coincidimos en que la reducción, como paso hacia la eliminación, de los subsidios agrícolas será clave para el equilibrio», dijo.