El coordinador de la Secretaría Técnica Permanente de Mercociudades (STPM), Jorge Rodríguez, participó como ponente en este encuentro y reflexionó acerca de qué desarrollo la Red propone financiar. Afirmando que el desarrollo sostenible desde la perspectiva de Mercociudades, debe alcanzarse en base a cuatro pilares: el económico, el social, el ambiental y el cultural, siendo imprescindible “construir ciudades con bienestar social en territorios urbanos, periféricos y rurales adyacentes, donde sus habitantes puedan vivir con calidad y dignidad”.

Del 9 al 11 de marzo, la ciudad de México fue sede de la conferencia temática Hábiat III “Financiar el desarrollo urbano: el reto del milenio”. El encuentro reunió a diversos actores para debatir las prioridades regionales, las temáticas y las recomendaciones emitidas por sus participantes. Estos aportes serán recogidas en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Vivienda y Desarrollo Urbano Sostenible, que se realizará en Quito a finales de octubre de este año.

La STPM expuso el 11 de marzo durante la tercera sesión de la conferencia, en la temática “Fortalecer e innovar en la recaudación fiscal a nivel local”, en donde se reflexionó sobre cómo los procesos de descentralización no siempre están acompañados de la transferencia de recursos y capacidades para que los gobiernos locales les hagan frente. Según los organizadores del evento “Mejorar, actualizar y modernizar los sistemas de recaudación fiscal, resulta fundamental para incrementar los ingresos propios y la autonomía financiera local”.

En este marco, Rodríguez abordó en su ponencia sobre la gestión, la gobernanza y la innovación, señalando que para la Red de Mercociudades, “la gestión local ha de ser eficiente si incorpora la planificación urbana, la participación social, la descentralización, los presupuestos participativos y la rendición de cuentas. Ya que estas herramientas contribuyen a ejecutar un mejor gasto”.

Por otra parte, mencionó la necesidad imperiosa de avanzar en nuevas formas de gestión, afirmando que “para ello debe situarse la mirada en una alianza con las Universidades y las articulaciones público-privadas”.

También destacó como un elemento con mucho potencial en la región al desarrollo del gobierno electrónico. Ya que “su aplicación implica repensar el modelo de gestión local que se sostiene desde los municipios. Este elemento ha transformado los modos de hacer de las tareas de funcionarios y mandos jerárquicos, y sobre todo la manera en que el Estado y los ciudadanos se vinculan”.

Para Mercociudades, un camino que integre los cuatro pilares del desarrollo (económico, social, ambiental y cultural) “debe trabajar en la integración de sociedades democráticas, tolerantes e inclusivas, fortaleciendo las identidades presentes en cada una de las regiones, promoviendo el trabajo decente y la distribución y generación de renta, buscando el pleno empleo, garantizando los derechos y deberes de los ciudadanos y el combate a la informalidad del trabajo.