El Ejecutivo argentino busca apoyo legislativo por si decide recurrir a La Haya para que dirima la disputa por las papeleras. La misma ha puesto a Uruguay y la Argentina en un nivel de máxima tensión inédito comprometiendo el funcionamiento del propio Mercosur.
Con la lectura de un duro informe en el que acusó a Uruguay de violar «tres veces» su tratado con Argentina de Administración Compartida del Río Uruguay, el canciller Jorge Taiana explicó ayer en el Congreso los fundamentos del Gobierno para su posible decisión de elevar ante la Corte Internacional de La Haya la controversia bilateral por la instalación de las dos plantas de celulosa en Fray Bentos.
Con la presentación que hizo este martes ante la Comisión de Relaciones Exteriores de Diputados, el canciller abrió la discusión sobre los dos proyectos de declaración, uno en la Cámara baja y otro en el Senado, que impulsa el gobierno de Néstor Kirchner.
Al autorizar la construcción de las papeleras, Uruguay «violó un tratado bilateral con la Argentina, vigente desde 1975», y «violó asimismo preceptos básicos del derecho internacional ambiental, poniendo en riesgo el bienestar y la salud de las comunidades adyacentes a este río compartido», comenzó diciendo el ministro que llegó con su equipo, y que mañana estará en el Senado.
Las tres violaciones a las que se refirió el ministro son: la autorización a la planta de la empresa española ENCE; la de la finlandesa Botnia; y la de la instalación de la terminal portuaria conexa a la fábrica de Botnia. Taiana hasta calificó de «irritante» la decisión del ex gobierno uruguayo de Jorge Batlle, del 14 de febrero de 2005, de permitir a Botnia su instalación en Fray Bentos.
Dijo que con las violaciones jurídicas «se vulneró la confianza reiteradamente depositada por nuestro país en una alternativa de diálogo y cooperación», por lo que Argentina «se ve obligado» a recurrir a La Haya «luego de haber visto sucesivamente frustrados sus esfuerzos por obtener del Uruguay el cumplimiento de ese mismo esquema de protección del río» que ambos «supieron construir». Y reiteró, como lo vienen diciendo el Gobierno y los ambientalistas, que el impacto de las papeleras será negativo.
Por su parte, el ex presidente Eduardo Duhalde consideró que «ya es tarde» para que la Argentina y Uruguay lleguen a un acuerdo por la instalación de dos plantas de celulosa en Fray Bentos.
En una velada crítica a la posición del gobierno de Néstor Kirchner, señaló: «Si son tan malditas las papeleras, ¿qué está pasando con la docena de fábricas que funcionan en la Argentina?».
Duhalde dijo que su sensación es que Uruguay ya no puede frenar el proyecto porque «terminaría con el gobierno» de Tabaré Vázquez. «Allá es una causa nacional», añadió el ex presidente en declaraciones efectuadas desde Brasil a Radio Continental y que informa este martes el matutino La Nación.
Por su parte, los ambientalistas endurecen las protestas y cortarán el paso hacia Paysandú, anunciando que este jueves al mediodía comenzará un nuevo corte de ruta que impedirá el paso desde Colón hacia Paysandú.
Tras la dura acusación del canciller argentino Jorge Taiana, acusando a Uruguay de violar un tratado internacional, desde el gobierno uruguayo salieron a responder que la Casa Rosada y se asegura que se incumplió con el Mercosur por haber permitido los bloqueos en las cabeceras de los puentes.
«Con estas declaraciones se endurece la discusión por las papeleras. No sé a que tratado se refiere el canciller. Uruguay siempre ha suministrado la información. En todo caso, Argentino violó el Mercosur porque no garantizó la libre circulación. Cuando hay piquetes en otros lugares dan garrotes hasta en el lomo», dijo el senador del MPP Jorge Sarabia a medios argentinos este martes.
Saravia respondió que «Tabaré no está decidido a envenenar a nadie. El país número 1 en el medio ambiente es Finlandia que da garantías y Uruguay también da garantías de que no se contaminará. De lo contrario, las plantas serán cerradas», informa el portal Infobae.